Los Mossos d'Esquadra han detenido a 35 presuntos miembros de dos grupos de ladrones multirreincidentes que acumulaban unas 600 detenciones y que se dedicaban a desvalijar a turistas en hoteles o vestíbulos de estaciones de Barcelona, y por otro lado a robar en coches con el método del 'pincharuedas'.
En rueda de prensa, el jefe del Área territorial de investigación de los Mossos en Barcelona, Ramon Grasa, ha informado de que de los 35 detenidos, a quienes no se les ha podido imputar asociación ilícita a pesar de que sí actuaban de manera organizada, siete han ingresado en prisión preventiva tras comparecer ante el juez.
Del primero de los grupos, que se dedicaba a los hurtos en hoteles, restaurantes de comida rápida y en vestíbulos de estaciones como Sants y la Estació del Nord, detuvieron a 23 personas de nacionalidad peruana, y el otro grupo, que reventaba las ruedas de coches en las avenidas Diagonal y Meridiana, arrestaron a las otras 12, procedentes de Marruecos y Argelia.
Las detenciones se han producido estas dos últimas semanas en Barcelona, algunas 'in fraganti', a raíz de una investigación que empezó en mayo de 2010 y que ha permitido relacionar a los detenidos, algunos de ellos familiares, con cerca de 120 hechos delictivos cometidos en los distritos del Eixample, Ciutat Vella, Sants, Les Corts y Sant Martí.
Largo historial delictivo
Muchos de ellos tienen un largo historial de detenciones, varios con más de una veintena, y han ido cambiando su manera de actuar a lo largo del tiempo, ya que algunos de los que ahora habían hecho de los hoteles sus centros de operaciones, se dedicaban en su día a robar en las autopistas catalanas y habían delinquido en el resto de España y en otros países europeos.
De hecho, las 600 detenciones anteriores que acumulan los arrestados --que tienen edades comprendidas entre los 25 y los 50 años-- tan sólo son de los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona, sin contabilizarse las de otros cuerpos policiales.
El grupo de ladrones que actuaba en hoteles y estaciones, afincado en localidades del área metropolitana, siempre iba al descuido, despistando a sus potenciales víctimas y aprovechando el momento del 'check in' en el hotel o de una consulta en los vestíbulos de las estaciones para hacerse con el botín, sobre todo joyas, dinero en efectivo, aparatos electrónicos y tarjetas de crédito.
La otra banda, que vivía principalmente en la capital catalana, se valía de un 'estilete' para reventar las ruedas de vehículos en avenidas principales de la ciudad y al prestar ayuda al conductor se hacían con sus pertenencias valiéndose de la confusión y no dudando en utilizar la violencia si les plantaban cara.
La investigación policial continúa abierta y según el jefe de investigación de los Mossos en Barcelona, no se descartan más detenciones. Por el momento, según Grasa, no tienen constancia de que los que han quedado en libertad con cargos hayan vuelto a delinquir.
Menos hurtos
La presión policial que se está ejerciendo contra los ladrones multirreincidentes que actúan en Barcelona ha permitido que este año haya caído un 5% el número de hurtos entre enero y septiembre, en relación al mismo periodo del año anterior.
Grasa ha recalcado que proporcionalmente se trata de una "cuantía muy importante" de hechos delictivos que se han evitado y ha explicado que se está haciendo un trabajo "transversal" desde las diferentes unidades de los Mossos, con el resto de cuerpos policiales y en colaboración con la Fiscalía y los jueces.
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