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viernes, 2 de julio de 2010

Carlos Batres, árbitro del partido Pesadilla paraguaya, estreno con España


El árbitro guatemalteco Carlos Batres, designado para dirigir el partido Paraguay-España de cuartos de final de la Copa del Mundo, trae malos recuerdos para la 'albirroja', mientras que nunca ha dirigido a la 'roja'.

Los paraguayos aún recuerdan su eliminación en octavos de final del Mundial de Corea y Japón 2002 ante Alemania (0-1), en un partido en el que reclamaron varios penaltis y finalmente cayeron eliminados después incluso de que fuera expulsado Roberto Acuña.

Recibió duras críticas de los jugadores paraguayos, principalmente del guardameta José Luis Chilavert, visiblemente molestos por su actuación. "Es el peor colegiado de la historia de Guatemala. Es una vergüenza lo que ha hecho la FIFA", dijo en una entrevista.

Licenciado en ciencias, nacido en Guatemala el 2 de abril de 1968, dirigió su primer partido internacional el 27 de octubre de 1996 en un Panamá-Canadá, y ha dirigido encuentros de Juegos Olímpicos (Atenas'04), Copa de Oro, Copa de las Confederaciones, Copa de Campeones de la CONCACAF y se encuentra actualmente en su segundo mundial.

Batres fue, además, el colegiado de la final del Mundial de clubes de 2006 entre el Internacional y el FC Barcelona, en Yokohama, con victoria del conjunto brasileño por 1-0. En aquel equipo azulgrana que dirigía el holandés Frank Rijkaard, jugaron varios componentes de la actual selección española, Víctor Valdés, Carles Puyol, Andrés Iniesta y Xavi Hernández.

En el Mundial 2002 dirigió, antes del recordado Alemania-Paraguay, el Dinamarca-Senegal, no pudo acudir a Alemania 2006 porque su equipo no pasó las pruebas físicas, y en el presente Sudáfrica 2010 ya ha dirigido el Argelia-Eslovenia y el Italia-Nueva Zelanda.

También ha arbitrado numerosos partidos de fases clasificatorias y finales de torneos de la zona de la CONCACAF, como la Copa de Oro y la Copa de Campeones. Así mismo, impartió justicia en tres partidos de los Juegos Olímpicos de Atenas, incluido el Iraq-Australia de cuartos de final.

Y es que Batres se caracteriza por su inflexibilidad y puede ser uno de los colegiados de la CONCACAF que a lo largo de la historia más tarjetas muestra por partido. El guatemalteco se dedica al arbitraje casi por casualidad, puesto que simplemente era un aficionado que, criado en el barrio de Santa Luisa, comenzó a jugar en el San Gabriel. Era defensa central y siempre jugaba con el '3'.

Una tarde, en 1983, acudió a otro campo a ver un partido y como no había colegiado se animó a agarrar el silbato. Fue el punto de partida porque no tardó en comenzar a hacer cursos y acabó ingresando en el colegio nacional, en cuyo torneo superior se estrenó en 1993 en un Amatitlán-Juventud Retalteca.

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