
El joven, llamado Alexander Selvik Wengshoel, nació con una deformidad y hace apenas cuatro años le operaron para implantarle una prótesis de metal.
Tras la intervención quirúrgica decidió llevarse la zona amputada acasa, la cocinó y terminó comiéndosela con patatas. Alexander grabó todo el proceso y presentó las imágenes como proyecto para podergraduarse.
"No todos los días voy a tener un trozo de carne humana, que sea mía y que pueda comer. Así que pensé: 'Eso es muy bonito'", ha asegurado el artista según el diario 'The Independent'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario