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jueves, 6 de junio de 2013

Los peligros de las centrales nucleares en Cataluña




. Ámbito temporal y analítico del estudio del colectivo imprescidible “Tanquem les nuclears-100% renovables”: desde octubre de 2005 a diciembre de 2012, recopilando y estudiando datos -a lo largo de estos más de 7 años- del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).
. Ubicaciones de los problemas (8 en total) en cada reactor: el edificio auxiliar, el edificio de combustible, el edificio de contención, el edificio de control (con especial mención a la sala de control), el edificio diesel, el edificio de penetraciones de la turbina y el edificio de salvaguarda (se ha añadido la denominación “sin determinar lugar concreto”, cuando la información dada por el CSN no menciona el lugar donde ha surgido el problema, 45 casos de total por otra parte).
. Causas de los problemas (10 en total): alarmas reales de radiación, paradas no programadas, deficiencias en los métodos de diseño, deficiencias de montaje, errores de actuación, fallos de un mecanismo, falsas arrancadas, falsas señales de alerta, incendios, e incumplimientos de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento (ETF) por parte de la dirección de la central.
. Mecanismos o procesos muy afectados (16 en total): alternador, barras de alimentación, bombas, conductos eléctricos, circuito primario, detectores de gases tóxicos, detectores de radiación, equipos de seguridad, estructura del edificio, generadores diesel, generadores de vapor, ordenadores, presionador, sellado, sistemas de refrigeración, válvulas, sin identificar mecanismos (26 problemas en total de los que el CSN no indica mecanismo concreto afectado)
. Número de problemas de funcionamiento de las tres centrales nucleares de Cataluña: 221 problemas (Por reactores: Ascó 1, 72; Ascó 2, 87; Vandellós 2, 62).
. Zonas más degradadas: el edificio de control (61 problemas, 29,8% del total); el edificio de contención (50 problemas, 24,4%), el edificio de combustible (23 problemas, 11,2%).
. Causas: debidos a actividades falsas o por mecanismos que deberían funcionar y no funcionar, el 59,3% de los problemas (121 del total de 221).
. Causa también importante: 4,9%, de los problemas se caracterizan como problemas de diseño o montaje (¡En centrales nucleares que llevan funcionando más de 25 años!).
. Otra causa básica (de 18 casos, 8,8%): problemas causados ¡por incumplimiento –¡INCUMPLIMIENTO!- de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento (EFT)!
. Puntos destacados en el informe: 1) el elevado número de problemas que el CSN presenta sin determinar una ubicación concreta en los reactores (45, un 22%). 2) la zona más afectada por los problemas es una de las más sensibles e importantes de las centrales: el edificio de control (29,8% del total si se suman los que afectan a la Sala de Control y al conjunto del edificio). 3) La segunda estructura más afectada es el edificio de contención, el núcleo más importante de las centrales. 4) Es importante destacar que la tercera zona más afectada sea el edificio de combustible.
. Sobre los mecanismos o procesos afectados: resulta chocante que un 12% de los problemas no tengan un mecanismo concreto con el que se puedan relacionar, que el porcentaje de problemas en detectores de radiación o de gases tóxicos sea de un 38%, y que el tercer bloque de mecanismos con problemas sea el de las válvulas. Existe un conjunto de sistemas en los que la frecuencia de problemas tiene un valor que va más allá de los datos cuantitativos: el circuito primario, los sistemas de refrigeración, los generadores de vapor y el presionador (todos estos sistemas se hallan en el edificio de contención).
. Aunque representan un porcentaje reducido de problemas -11,2% del total-: son indicativos del estado de degradación de los reactores: son componentes muy complejos y de difícil sustitución, que funcionan en condiciones límites de presión y temperatura y que son vitales para la seguridad.
. Análisis de los reactores:
A) ASCÓ 1: 36 de los problemas del reactor, casi la mitad, se dan en el edificio de contención y en el edificio de control. Hay que añadir que de los 13 problemas en los que no se determina la ubicación, 6 parecen estar relacionados con mecanismos de control. Por lo tanto, en los dos edificios principales de la central se concentran casi el 60% de los problemas. Los detectores de radiación indican problemas de radiación alta en 10 ocasiones y en otras 14 ocasiones tienen errores. En los 9 problemas causados por válvulas, hay 4 ocasiones en que no se indica el lugar, y otras 4 en que resultan afectadas válvulas del edificio de contención. Las 39 causas principales de problemas: fallos, falsas señales de alerta y falsos arranques (representan más del 53%), se pueden considerar como averías. Deben ser objeto de especial mención los 9 casos de incumplimiento de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento, conjuntamente con las 2 causas calificadas por el CSN como deficiencias de métodos de diseño o deficiencia de montaje.
B) ASCÓ 2: 87 problemas en 91 ubicaciones. La proporción de problemas que afectan a los dos edificios claves del reactor -el edificio de control y el de contención- es de un 59,4%. En el edificio de contención se dan 7 problemas relacionados con válvulas y 3 más relacionados con una parte tan importante del reactor como es el presionador. En el Edificio de Control, 29 de los 32 problemas se relacionan con falsas alarmas de detectores de radiación o de gases. Hay 7 arranques no previstos (o “espontáneos”) de los generadores del edificio diesel, sin que la información indique su causa. Y 17 problemas que se consignan sin que se determine el lugar concreto donde se producen. De los mecanismos afectados por los 90 problemas destacan las 35 falsas alarmas en detectores de gases y radiación.
Son más inquietantes algunos problemas estructurales: el 10 de octubre del 2005 se detectan dos áreas de contaminación radiactiva fija en un lugar no determinado del reactor; el 4 de mayo del 2006, se señalan deficiencias de diseño, sin especificar el lugar en que se producen; el 20 de febrero del 2009, se da una relación de cinco tipos de anomalías que afectan al edificio de control. De ninguno de estos problemas se da explicación posterior. En total se determinan 88 problemas con causas definidas. Las falsas señales de alerta y los arranques en falso representan un 45,4% del total. Destaca que 8 de los fallos de mecanismos, de los 21 totales, pasan en el edificio de contención; que no se dan datos ni de mecanismos ni del lugar exacto en que se producen 6 fallos más, y que 4 de los incumplimientos de las ETF afectan a válvulas, aunque tan sólo en un caso se indica el lugar donde está la válvula: en el edificio de contención.
C) VANDELLÒS II: 62 problemas. En 21 de los casos (35% del total) no se define el lugar concreto donde se han dado. Entre los problemas que sí que tienen ubicación definida, 29, casi la mitad del total restante afectan a las dos áreas sensibles ya mencionadas: el edificio de control y el de contención. El escándalo de la corrosión estructural del sistema de refrigeración, denunciado en 2004, provocó una alteración que hace que se deban de considerar especialmente los datos posteriores a 2008, que es cuando la situación parece volver a la normalidad. De los 35 problemas que se contabilizan entre el 2008 y el 2012, 9 corresponden al edificio de control, 7 al edificio de contención y 11 no tienen una ubicación definida. En cuanto a mecanismos o procesos afectados es necesario indicar que de los 11 problemas relacionados con válvulas, 6 no tienen ubicación definida y 2 afectan a mecanismos del edificio de contención. Durante 2006 se produjeron 4 paradas no programadas; en ninguna de ellas se identificó el mecanismo exacto que las había provocado. De los 9 problemas en los que no se identifica el mecanismo afectado, 3 implican la parada automática del reactor. Hay 5 casos de fallos en las que no se identifica ni el lugar ni el mecanismo exacto que falla, con el agravante de que uno de esos casos afecta a un incumplimiento de las ETF.
. Características comunes (8 en total) de los tres reactores atómicos: 1. Que la mayoría corresponden a las partes más importantes de los reactores: el edificio de contención y el de control, con especial incidencia en la sala de control; 2) que hay una elevada cantidad de problemas en los que las informaciones del CSN no especifican el lugar concreto en que se producen, 3) que los mecanismos más afectados son los detectores de radiación o de gases tóxicos seguidos por las válvulas; 4) que se da un importante número de problemas en que las informaciones del CSN no identifican el mecanismo concreto afectado; 5) que la causa más repetida de problemas es la falsa señal de alerta por contaminación radiactiva o por gases tóxicos, seguida por el fallo de funcionamiento de mecanismos diversos; 6) que existe un porcentaje alto de problemas que se originan por incumplimientos de las ETF, lo que deja en evidencia falsos tópicos sobre el “rigor” y la “seguridad” de las centrales; 7) que resulta inexplicable que estos incumplimientos de las ETF no lleven aparejados de manera inmediata fuertes sanciones económicas a los propietarios de los reactores; 8) que resulta significativo que en centrales que llevan funcionando más de 25 años aparezcan 11 problemas que se consideran causados por deficiencias de diseño o de montaje.
. Conclusiones: los tres reactores nucleares en funcionamiento en Cataluña sufren graves problemas como resultado del paso del tiempo y de las propias limitaciones de la tecnología nuclear (toda tecnología las tiene). Unido a las tortuosas historias de complicidades y negligencias entre propietarios, técnicos, gestores y organismos reguladores que cada problema grave ha puesto al descubierto, se demuestra que estamos ante un grave peligro para la población y el medio ambiente de Cataluña y de los territorios limítrofes: los tres reactores son mecanismos envejecidos y muy degradados, lo que hace prioritario un plan de cierre urgente y ordenado de Ascó 1, Ascó 2 y Vandellós 2. ¡Sí se puede!

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