Caracas, 22 may (PL) El vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, denunció la "trama monstruosa y planetaria de control de la biodiversidad" impulsada en su país por entidades asociadas a grandes potencias, durante una entrevista transmitida hoy aquí.
En declaraciones a Venezolana de Televisión, el alto funcionario recordó que los procesos revolucionarios en América Latina están llevando adelante, con mayor o menor profundidad, grandes transformaciones económicas y políticas, lo cual genera reacciones de la oposición ultraconservadora.
Los contrarrevolucionarios no abandonarán fácilmente los privilegios y si no pueden lograrlo por la vía democrática, lo intentarán por la vía violenta, alertó.
En el caso específico de la nación altiplánica, señaló la existencia de organizaciones no gubernamentales, especialmente vinculadas a Estados Unidos, y a "toda esta trama monstruosa y planetaria de control de la biodiversidad".
Varios de esos entes actúan en Bolivia vinculados a "esta lógica imperial de preservación del medio ambiente para las grandes potencias" y han intentado promover a dirigentes sociales en contra del gobierno.
Estamos enfrentando este conflicto entre la voluntad nacional estatal de sentar soberanía y esos grupos que quieren "preservar microrepubliquetas, donde no haya presencia del Estado", refirió García, quien añadió que en ello han detectado financiamiento de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo.
El vicepresidente ratificó que la zona de la Amazonía es para los latinoamericanos y recordó que el 95 por ciento de la población indígena forma parte de las estructuras de decisión y de poder de la nación suramericana.
Del cinco por ciento restante, hemos llegado a acuerdos con más de la mitad, y la otra parte es la que promueve las marchas, y tiene bastante repercusión en los medios de comunicación, con el objetivo de convertir ese movimiento en algo que aparentemente abarcara a la mayoría del pueblo indígena.
Estaríamos hablando de un movimiento que, en el mejor de los casos, abarca a un cinco por ciento del total de los indígenas, subrayó.
De acuerdo con García, para contrarrestar esa situación, la administración del presidente Evo Morales decidió impulsar, entre otras medidas, medios de comunicación alternativos y se han creado numerosas radios comunitarias.
En declaraciones a Venezolana de Televisión, el alto funcionario recordó que los procesos revolucionarios en América Latina están llevando adelante, con mayor o menor profundidad, grandes transformaciones económicas y políticas, lo cual genera reacciones de la oposición ultraconservadora.
Los contrarrevolucionarios no abandonarán fácilmente los privilegios y si no pueden lograrlo por la vía democrática, lo intentarán por la vía violenta, alertó.
En el caso específico de la nación altiplánica, señaló la existencia de organizaciones no gubernamentales, especialmente vinculadas a Estados Unidos, y a "toda esta trama monstruosa y planetaria de control de la biodiversidad".
Varios de esos entes actúan en Bolivia vinculados a "esta lógica imperial de preservación del medio ambiente para las grandes potencias" y han intentado promover a dirigentes sociales en contra del gobierno.
Estamos enfrentando este conflicto entre la voluntad nacional estatal de sentar soberanía y esos grupos que quieren "preservar microrepubliquetas, donde no haya presencia del Estado", refirió García, quien añadió que en ello han detectado financiamiento de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo.
El vicepresidente ratificó que la zona de la Amazonía es para los latinoamericanos y recordó que el 95 por ciento de la población indígena forma parte de las estructuras de decisión y de poder de la nación suramericana.
Del cinco por ciento restante, hemos llegado a acuerdos con más de la mitad, y la otra parte es la que promueve las marchas, y tiene bastante repercusión en los medios de comunicación, con el objetivo de convertir ese movimiento en algo que aparentemente abarcara a la mayoría del pueblo indígena.
Estaríamos hablando de un movimiento que, en el mejor de los casos, abarca a un cinco por ciento del total de los indígenas, subrayó.
De acuerdo con García, para contrarrestar esa situación, la administración del presidente Evo Morales decidió impulsar, entre otras medidas, medios de comunicación alternativos y se han creado numerosas radios comunitarias.
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