Por Miriam Valdés Casamayor*
La Habana (PL) A partir de mañana domingo, primero de abril, comenzará a regir en Cuba el Horario de Verano; por ello deberá adelantarse una hora las manecillas del reloj, a las doce de la noche del sábado 31 de marzo.
Ante la tradicional medida, que pondrá fin al actual Horario Normal, muchos se preguntan a quién se le ocurrió el cambio de horario para lograr un mayor aprovechamiento de la luz solar en las actividades cotidianas.
Para conocer la respuesta, vale remontarse a 1784, cuando el científico estadounidense Benjamín Franklin, entonces embajador de los Estados Unidos, envió una carta al diario Le Journal de París, donde planteaba algunas medidas para el ahorro energético.
En su misiva,Franklin proponía imponer un gravamen a las personas cuyas contraventanas impidiesen la entrada de luz a sus habitaciones, y regular el consumo de cera y velas.
Sugería también hacer repicar las campanas de la iglesia al amanecer para que todo el mundo se levantase a la misma hora.
Tales propuestas no se tomaron en serio, pero poco tiempo después comenzaron los primeros experimentos de iluminación con gas, cuya peligrosidad hizo plantearse seriamente el tema del ahorro energético.
No fue hasta la Primera Guerra Mundial, en 1916, cuando se decidió cambiar la hora. Los países optaron por tal práctica, pero después de la Segunda Guerra Mundial volvió a abandonarse su uso.
Así, poco a poco, las ideas del científico estadounidense fueron retomándose y evolucionando hasta llegar a la conclusión de que lo más conveniente era cambiar la hora, una medida que no se instauró plenamente hasta 1974.
Más tarde, con la crisis del petróleo y la reducción de barriles del crudo, los países occidentales adoptaron nuevamente la propuesta de Benjamín Franklin para economizar combustible.
Actualmente, 86 países emplean el cambio de horario con similares objetivos.
CAMBIO DE HORARIO EN CUBA
El cambio de horario se estableció por primera vez en Cuba, en 1928, y luego del triunfo de la Revolución cubana, en 1959, siguió aplicándose dos veces al año, lo que permite adaptar las actividades al ciclo de luz solar.
Así, a partir de mañana los cubanos se regirán por el Horario de Verano y, de igual forma, lo harán todos los mexicanos, mientras que en los estados brasileños de centro-oeste, sur y sudeste será aplicado el 21 de octubre próximo.
En la actualidad, no se rigen por el Horario de Verano países como Guatemala, Honduras, El Salvador, Costa Rica, y Colombia, los cuales se mantienen en su horario oficial.
*Periodista del Servicio de Radio de Prensa Latina.
La Habana (PL) A partir de mañana domingo, primero de abril, comenzará a regir en Cuba el Horario de Verano; por ello deberá adelantarse una hora las manecillas del reloj, a las doce de la noche del sábado 31 de marzo.
Ante la tradicional medida, que pondrá fin al actual Horario Normal, muchos se preguntan a quién se le ocurrió el cambio de horario para lograr un mayor aprovechamiento de la luz solar en las actividades cotidianas.
Para conocer la respuesta, vale remontarse a 1784, cuando el científico estadounidense Benjamín Franklin, entonces embajador de los Estados Unidos, envió una carta al diario Le Journal de París, donde planteaba algunas medidas para el ahorro energético.
En su misiva,Franklin proponía imponer un gravamen a las personas cuyas contraventanas impidiesen la entrada de luz a sus habitaciones, y regular el consumo de cera y velas.
Sugería también hacer repicar las campanas de la iglesia al amanecer para que todo el mundo se levantase a la misma hora.
Tales propuestas no se tomaron en serio, pero poco tiempo después comenzaron los primeros experimentos de iluminación con gas, cuya peligrosidad hizo plantearse seriamente el tema del ahorro energético.
No fue hasta la Primera Guerra Mundial, en 1916, cuando se decidió cambiar la hora. Los países optaron por tal práctica, pero después de la Segunda Guerra Mundial volvió a abandonarse su uso.
Así, poco a poco, las ideas del científico estadounidense fueron retomándose y evolucionando hasta llegar a la conclusión de que lo más conveniente era cambiar la hora, una medida que no se instauró plenamente hasta 1974.
Más tarde, con la crisis del petróleo y la reducción de barriles del crudo, los países occidentales adoptaron nuevamente la propuesta de Benjamín Franklin para economizar combustible.
Actualmente, 86 países emplean el cambio de horario con similares objetivos.
CAMBIO DE HORARIO EN CUBA
El cambio de horario se estableció por primera vez en Cuba, en 1928, y luego del triunfo de la Revolución cubana, en 1959, siguió aplicándose dos veces al año, lo que permite adaptar las actividades al ciclo de luz solar.
Así, a partir de mañana los cubanos se regirán por el Horario de Verano y, de igual forma, lo harán todos los mexicanos, mientras que en los estados brasileños de centro-oeste, sur y sudeste será aplicado el 21 de octubre próximo.
En la actualidad, no se rigen por el Horario de Verano países como Guatemala, Honduras, El Salvador, Costa Rica, y Colombia, los cuales se mantienen en su horario oficial.
*Periodista del Servicio de Radio de Prensa Latina.
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