Durante la tramitación de la norma, muchos expertos denunciaron que sería ineficaz y que ponía en riesgo derechos fundamentales, pero nunca fueron escuchados y la norma salió adelante a espaldas de la sociedad civil española, ahora, Hacktivistas ha demostrado lo anterior de forma práctica y sin fisuras, como se sospechaba, al margen de para soliviantar a los españoles, la Ley Biden-Sinde no vale para nada...
Para la edición del "Manual de desobediencia a la Ley Sinde", Hacktivistas ha contando con la colaboración de la editorial Traficantes de Sueños y del periódico Diagonal. Dicho manual, que tiene un precio de solamente 3 euros si se desea en papel, también se ha publicado con una licencia libre, por lo que se puedes descargar libremente y sin coste desde la página web de la editorial Traficante de Sueños.
Hay que decir, que el "Manual de desobediencia a la Ley Sinde" está siendo un éxito y en pocas horas ya ha tenido más de 17.669 descargas, sin contar las ventas en papel que tampoco van mal y se pueden formalizar "on-line".
Hay que señalar, que este manual sobre la ley Biden-Sinde se une a otro manual igualmente interesante de Hacktivistas, que se titula "Música, cine y televisión legal, libre y gratuita en Internet. Guía para madres y profesoras". Esta Guía ha sido creada por un conjunto de personas de la sociedad civil española, coordinadas a través del colectivo Hacktivistas y que ha contado con la ayuda y supervisión altruista de personas expertas en cultura y en derecho. Esta Guía que, también cuenta con una licencia Creative Commons, está teniendo una enorme aceptación en la sociedad española, en especial, entre los colectivos de educadores y asociaciones de padres de alumnos, por lo que la recomiendo leer y difundir.
Esta Guía de Hacktivistas nació como contestación a otra Guía publicada recientemente por los lobbies del sector como Promusicae, SGAE y FAP, que se ha distribuido a través de Childnet, con la intención de hacerla circular entre los alumnos y alumnas de primaria y secundaria, contando para su difusión con la colaboración del Ministerio de Cultura.
Hacktivistas, así como muchos expertos del mundo de la cultura y de la educación española, consideraron que esta Guía promovida por la "industria cultural", constituía un grave intento de manipulación de los jóvenes españoles y que tenía como intención hacerles clientes pasivos de una serie productos "culturales", que en en muchas ocasiones, incluso se podrían considerar de muy baja calidad.
Los autores de la Guía alternativa vieron con mucha preocupación que la Guía promovida por la industria también contenía publicidad engañosa, anunciando repetidamente y como los únicos legalmente "válidos", los portales que dependen de los promotores de la misma, intentando encauzar al lector hacia sus productos y disuadiendo a los jóvenes de buscar y escoger espacios culturales virtuales y participativos, no asociados a las industrias.
Aunque debería estar claro a estas alturas que no solamente es cultura aquello que se vende y que hay muchas más formas de comercializar y de difundir la cultura, parece que el Ministerio de Cultura no está por la labor de difundirlo adecuadamente entre la sociedad española y siempre muestra una visión parcial e industrial de la cultura.
Esta grave intento de manipulación del alumnado, se sumaba al que se puso en evidencia mediante el Documental de TVE2 "¡Copiad Malditos!", que es el primer documental de Televisión Española publicado con una licencia Creative Commons y donde se mostraba claramente el "lavado de cerebro" que se promueve en algunos colegios de España, mediante programas "educativos" con contenidos tan cuestionables como "Educar para Crear". Programa que aunque se vende como educación en derechos de propiedad intelectual, obvia de forma interesada toda aquella propiedad intelectual que no está sujeta a un intercambio económico y a licencias privativas.
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