Las muertes violentas asociadas con el crimen organizado en México fueron 12.456 de enero a noviembre de este año, según informó este jueves la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía).
Con ese nuevo dato asciende a 30.196 el número de muertos en la misma circunstancia desde diciembre de 2006, cuando asumió el presidente Felipe Calderón, cuyo Gobierno aplicó un programa de lucha frontal con activa participación las Fuerzas Armadas contra los cárteles del narcotráfico.
El dato es el primero de carácter oficial emanado del Gobierno desde que el pasado 3 de agosto el director del Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional (Cisen), Guillermo Valdés, informara de que había poco más de 28.000 muertes hasta mediados de julio.
La cifra fue actualizada por personal de la PGR (Fiscalía federal) durante un desayuno con la prensa encabezado por el titular de la dependencia, Arturo Chávez Chávez.
El alto funcionario señaló que el Gobierno federal ha reafirmado la presencia de la autoridad pública en el país, promovido la depuración, profesionalización, capacitación y equipamiento de la policía y trabajado por la recuperación del tejido social para prevenir las causas del delito.
Sin embargo, admitió que el Estado "necesita transformar sus instituciones para estar a la altura de las necesidades que la sociedad le impone" y "ser más eficaz" en afrontar la criminalidad, una tarea en la que apremió a las autoridades de los 32 estados federados del país.
El fiscal general mexicano informó de que las autoridades se incautaron desde que gobierna Calderón de 51.000 millones de dosis de cocaína, marihuana y heroína, lo que a precios de mercado habría alcanzado unos 11.174 millones de dólares.
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