.

.

sábado, 14 de enero de 2012

Al menos tres muertos al encallar un crucero con 4.000 pasajeros en Italia


Escenas del 'Titanic' se revivieron anoche a bordo del buque crucero Costa Concordia, con 4.200 personas bordo, que ha encallado en las inmediaciones de la pequeña isla de Giglio, situada en aguas de la región italiana de Toscana. Tras el suceso, al menos tres personas han muerto y 14 han resultado heridas, en lugar de las seis personas fallecidas que se contabilizaron en un primer momento, según el recuento ofrecido por el prefecto de Grossetto, Giuseppe Linardi.

"Hay tres muertos certificados", ha indicado el prefecto de la ciudad, explicando que si en un principio se habló de una cifra más abultada de fallecidos fue por los problemas de organización de las labores de socorro.

La nave, llamada Costa Concordia, estaba efectuando una crucero por el Mediterráneo, que salió de la ciudad costera italiana de Savona (norte) con escalas previstas en Civitavecchia, Palermo, Cagliari, Palma de Mallorca y Barcelona, Marsella y regreso a Savona, según una nota de la compañía naviera.

A bordo viajaban alrededor de mil pasajeros de nacionalidad italiana, otros 500 alemanes, cerca de 160 franceses y 12 españoles, además de unos mil miembros de la tripulación. Pocas horas después del naufragio, un español, natural de A Coruña (Galicia), llamó al consulado para informar de lo ocurrido y señalar que formaba parte de un grupo de doce españoles -seis parejas- que participaban en el crucero por el Mediterráneo y que todos estaban bien.

El español contó que no llegaron a caer al agua, que fueron rescatados desde el interior del barco y trasladados a la isla de Giglio. Allí fueron ubicados en una iglesia de la pequeña isla toscana, abierta toda la noche y que hoy serán trasladados a un hotel de Roma.

Se sintió un golpe y un gran estruendo

Dos horas después de salir de Civitavecchia, hacia las 21.30 horas, cuando el buque se encontraba en las cercanías de la isla de Giglio y la mayoría de los pasajeros cenaban, se fue la luz y se sintió un golpe y un gran estruendo, relataron después los náufragos a los medios italianos. Al parecer, el crucero pudo chocar con otro barco.

Aunque los pasajeros fueron advertidos por el capitán de que se trataba de un problema eléctrico, se percataron de que la nave se estaba inclinando y poco después fueron invitados a ponerse el chaleco salvavidas y a subir al puente y situarse ante las lanchas de emergencia.

Cuando los allí reunidos se dieron cuenta de que no se trataba de un problema eléctrico y que estaba entrando agua en el buque, se vivieron escenas de pánico y empellones a la hora de embarcar en las lanchas salvavidas y en las patrulleras de los bomberos de Civitavecchia y de Livorno que han ido trasladando a los pasajeros a la isla de Giglio.

El párroco de Giglio ha tenido que abrir las puertas de la iglesia de San Lorenzo y Massimiliano, en ausencia de otros albergues disponibles.

Mujeres elegantemente vestidas con los zapatos de tacón en la mano, niños llorando y personas somnolientas tumbadas en el suelo componen el cuadro de la parroquia. Cuando el crucero se inclinó hacia un lado algunos pasajeros entraron en pánico y saltaron por la borda, según dijo el prefecto de Grosseto, Giuseppe Linardi.

El transbordo de pasajeros está casi completo, pero la isla de Giglio es demasiado pequeña para hospedar a 4.200 personas por lo que la región de Toscana a la que pertenece ha activado un plan de socorro para que los náufragos sean transportados al elegante puerto de Santo Stefano.

Por su parte, la compañía Costa Crociere propietaria del crucero Costa Concordia ha asegurado que todavía "no es posible definir la causa del problema ocurrido". El Costa Concordia, de 300 metros de eslora, fue terminado en 2006. De acuerdo con el astillero, tiene capacidad para 3.780 pasajeros, de los que se ocupan 1.100 tripulantes.

No hay comentarios: