Uruguay 4 - Chile 0

Fernando Muslera (5): Una noche bastante tranquila, descolgando bien en los centros.

Martín Cáceres (5): Prolijo y rápido, sin errores para marcar y sin desatender su zona. Como lateral derecho demostró que sirve para jugar en todas las posiciones.

Diego Lugano (5): Dominó el área, ordenó a sus compañeros, ejerció un dominio hasta sicológico sobre los rivales, y encima fue protagonista de más de una acción de gol, fundamentalmente en el juego aéreo, en las jugadas de pelota quieta.

Diego Godín (5): Algunos errores en la entrega de pelota, pero en la mayoría de sus intervenciones se mostró eficaz. Atento en todo momento y con precisión para el cálculo a la hora de salir a anticipar o a cerrar.

Álvaro Pereira (5): No tuvo demasiados inconvenientes en su zona. Controló bien ese sector y cuando tuvo la oportunidad se mandó al ataque con su clásica velocidad y dinámica.

Álvaro González (5): Intentó aportar con sus llegadas por la banda derecha, aunque no estuvo del todo claro y tampoco encontró espacios para maniobrar. En la parte defensiva cumplió buena tarea, sumándose a la línea de batalladores del mediocampo junto al “Ruso” y Arévalo.

Diego Pérez (7): Apareció por todos lados, en el medio y en tres cuartos de cancha, siempre presionando y robando, y a veces hasta generando jugadas de gol. Un fenómeno, un incansable que mantiene siempre la humildad.

Arévalo Ríos (6): Aplicado a la marca, sin desatenciones, llegando justo siempre, sin excederse, y cuando recuperó sacó contragolpes con gran rapidez, demostrando inteligencia.

Gastón Ramírez (5): Le costó meterse en el partido. En el primer tiempo apenas apareció un par de veces sin llegar a ser el generador de fútbol que se esperaba.

Edinson Cavani (6): Opacado por Suárez, igual tuvo un buen rendimiento aunque le faltó meterla adentro.

Sebastián Abreu (5): No demoró en meterse en el partido y demostró inteligencia en cada jugada.

Sebastián Eguren (5): Bien.

Cristian Rodríguez (-): Su única aparición fue cuando metió un codazo y se ganó tontamente una amarilla.