Una vez finalizada la audiencia judicial, el juez penal especializado en Crimen Organizado de 2º Turno, doctor Jorge Díaz, envió a la cárcel a los integrantes de una banda que estaba por comenzar a enviar droga hacia Europa, adosando tarrinas con unos 25 kilos de cocaína en la parte inferior de grandes buques.
Esta fue desbaratada por efectivos de la Dirección General de Represión del Tráfico Ilícito de Drogas (Dgrtid), con la anuencia del magistrado actuante, en la denominada operación "Atlántico Sur". Los colombianos de iniciales CAPC y FJZR por "organización", y sus compatriotas NEFP, DJQR, y el argentino OAPG, por "posesión", todos por "reiterados delitos de tráfico ilícito de sustancias estupefacientes prohibidas en reiteración real con un delito de actos tendientes a la introducción ilegal de sustancias estupefacientes prohibidas en países extranjeros, especialmente agravado por la participación de un grupo criminal organizado". Pero las actuaciones acerca de esta banda no terminaron, ya que la Justicia libró un pedido internacional de captura, a través de Interpol, para la detención de otros dos integrantes, un colombiano y un argentino.
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