La presunta ladrona responde al nombre de Mónica Bibiana S. S., de 33 años, y es vecina de Rubí. La policía autonómica asegura que la mujer acudía a bares y discotecas de Barcelona para seducir a sus víctimas y acabar tomando una copa con ellos. A partir de ahí aprovechaba un despiste de los hombres, que se las prometían muy felices, y disolvía un somnífero en la bebida. A los pocos segundos las víctimas entraban en un profundo sueño y cuando despertaban sólo recordaban vagamente la presencia de la mujer. Pero el verdadero sobresalto se producía cuando buscaban la cartera y comprobaban que se la había robado. En el caso de dos de las cinco víctimas, la mujer incluso logró retirar cantidades de dinero de varios cajeros automáticos.
Uno de los hombres hubo de ser trasladado a un hospital cuando despertó, dado el estado de salud en el que se encontraba. En el momento de la detención, los Mossos d'Esquadra intervinieron a la mujer una bolsa que contenía 12 pastillas de somníferos y dos recetas médicas para adquirir un medicamento indicado para el tratamiento a corto plazo de los trastornos del sueño. También encontraron en su bolso tres tarjetas de crédito a nombre de los denunciantes y una libreta con el nombre y la dirección de los locales en los que había actuado.
Los Mossos d'Esquadra iniciaron la investigación policial tras recibir varias denuncias de hombres que coincidían en que les había robado una mujer de melena rizada, de 1,70 metros de estatura, que les había dormido echando alguna sustancia en la bebida mientras estaban tomando juntos una copa.
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