El Govern mantendrá la consulta independentista para 2014. El
portavoz del Ejecutivo catalán aseguró esta mañana que se cumplirán los
plazos ya estipulados, es decir fijación de la fecha y pregunta del referendo a final de este año y celebración del mismo en el siguiente.
De hecho, Homs aclaró que las conversaciones con las fuerzas parlamentarias para ofrecer una respuesta "unitaria" que ayer anunció el presidente de la Generalitat, Artur Mas, irán enfocadas, precisamente, a "acordar de la forma más mayoritaria las bases para hacer la consulta en 2014". Y remarcó que esos contactos se iniciarán inmediatamente coincidiendo con el cercano Debate de Política General que se celebrará en el Parlament a final de mes.
El portavoz del Govern aseguró, de todos modos, que "explorarán el compromiso de diálogo" ofrecido por Rajoy, pero alertó al presidente: "No seremos ingenuos, ni aceptaremos dilaciones en el calendario". Homs también sembró dudas sobre la oferta de Rajoy al asegurar: "Ya veremos si se acaba produciendo", basándose en que la misiva no concreta "el cuándo ni el cómo", de dicho diálogo.
Homs admitió que el contenido de la misiva no satisfizo las aspiraciones del Govern, que esperaba una respuesta "al estilo Cameron", es decir, que el Gobierno emulara al primer ministro británico y concediera el referendo a Cataluña tal y como éste hizo con Escocia. "No es la respuesta a la altura de lo que el pueblo de Cataluña ha expresado de forma ilustrativa y masiva en la Diada y las urnas", abundó el portavoz. Dijo que el Govern pretendía que Rajoy acatase y empezase "una negociación abierta para poner fecha, pregunta y asumir las consecuencias".
El vocero argumentó que la discusión no está en la legalidad como plantea Rajoy en su carta y manifestó que, aunque "el norte del Govern y el Parlament siempre ha sido ese principio de legalidad", la solución debe nacer de la "voluntad política". En este sentido recriminó al presidente del Gobierno que no se haya postulado sobre ninguna de las cinco vías legales ofrecidas por el Govern para celebrar el referendo, esto es: la antigua ley de consultas catalana recurrida ante el TC, la que el Parlament está a punto de aprobar, la habilitación de un referendo por parte del Estado, la delegación de competencias a la Generalitat para celebrarla o una modificación de la Constitución que otorgue esa potestad a Cataluña.
De hecho, Homs aclaró que las conversaciones con las fuerzas parlamentarias para ofrecer una respuesta "unitaria" que ayer anunció el presidente de la Generalitat, Artur Mas, irán enfocadas, precisamente, a "acordar de la forma más mayoritaria las bases para hacer la consulta en 2014". Y remarcó que esos contactos se iniciarán inmediatamente coincidiendo con el cercano Debate de Política General que se celebrará en el Parlament a final de mes.
El portavoz del Govern aseguró, de todos modos, que "explorarán el compromiso de diálogo" ofrecido por Rajoy, pero alertó al presidente: "No seremos ingenuos, ni aceptaremos dilaciones en el calendario". Homs también sembró dudas sobre la oferta de Rajoy al asegurar: "Ya veremos si se acaba produciendo", basándose en que la misiva no concreta "el cuándo ni el cómo", de dicho diálogo.
Homs admitió que el contenido de la misiva no satisfizo las aspiraciones del Govern, que esperaba una respuesta "al estilo Cameron", es decir, que el Gobierno emulara al primer ministro británico y concediera el referendo a Cataluña tal y como éste hizo con Escocia. "No es la respuesta a la altura de lo que el pueblo de Cataluña ha expresado de forma ilustrativa y masiva en la Diada y las urnas", abundó el portavoz. Dijo que el Govern pretendía que Rajoy acatase y empezase "una negociación abierta para poner fecha, pregunta y asumir las consecuencias".
El vocero argumentó que la discusión no está en la legalidad como plantea Rajoy en su carta y manifestó que, aunque "el norte del Govern y el Parlament siempre ha sido ese principio de legalidad", la solución debe nacer de la "voluntad política". En este sentido recriminó al presidente del Gobierno que no se haya postulado sobre ninguna de las cinco vías legales ofrecidas por el Govern para celebrar el referendo, esto es: la antigua ley de consultas catalana recurrida ante el TC, la que el Parlament está a punto de aprobar, la habilitación de un referendo por parte del Estado, la delegación de competencias a la Generalitat para celebrarla o una modificación de la Constitución que otorgue esa potestad a Cataluña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario