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sábado, 1 de septiembre de 2012

Después de tantos años, la Vespa sigue joven

Con 65 años a sus espaldas y más de 17 millones de unidades vendidas por todo el mundo, pocos vehículos pueden presumir de seguir tan frescos después de esa eternidad como la Vespa, un scooter que, además, sigue ofreciendo un cierto halo de exclusividad (tampoco es barato) a sus conductores. Y eso, sin perder sus grandes virtudes, como son la facilidad de manejo, la economía de uso y una robustez y seguridad muy elevadas.

Aunque claro, que persista en el tiempo no quiere decir que esté anclada en él. Al contrario, como demuestran las dos nuevas versiones que acaban de ponerse a la venta en nuestro mercado: la S 3V y la LX 3V.

La primera viene a ser hereditaria de modelos de los años 70 como la 50 Special o la Primavera, para ofrecer la versión más deportiva y juvenil de la gama.

El faro cuadrado, los relieves decorativos desde el manillar hasta el guardabarros y el perfil del asiento son las características que la distinguen, y se añaden a la elección del color rojo para el monoamortiguador y una gráfica inédita en la instrumentación.

La posición de conducción sigue siendo cómoda gracias al asiento corrido para dos plazas en el que se ha añadido la correa para que se sujete el acompañante.

En cuanto a la LX 3V, se trata de una actualización que manteniendo el estilo clásico de las Vespa, y en ella predominan los elementos redondos por contraste a la S. Además, cuenta con detalles no tan visibles como la espuma con la que se ha rellenado el asiento para conseguir que la distancia al suelo sea de solo 78,5 centímetros.

Aunque tanto la Vespa S como la LX están disponibles con dos motores de 50 centímetros cúbicos (uno de dos tiempos y otro de cuatro, con nada menos que 4,35 caballos), la gran revolución llega con el nuevo propulsor 125 3V.

La traducción de esas siglas no es compleja: bloque monocilíndrico de 125 centímetros cúbicos al que, como gran innovación, se le han montado tres válvulas (dos de admisión y una de escape). Además, lleva inyección electrónica de combustible, refrigeración por aire y cuatro tiempos.

Se trata de una joya en el segmento que logra, a la vez que mejoran las prestaciones y la respuesta a bajas revoluciones, reducir los consumos y emisiones.

Por ejemplo, la potencia (11,8 caballos) mejora un 7,1% y el par máximo, un 10,3%. En paralelo, el gasto en combustible se recorta hasta un 30%, lo que equivale a unos 1.500 kilómetros extras al año dado el uso que hace un cliente medio de Vespa. Además, los intervalos de mantenimiento se programan ahora cada 10.000 kilómetros.

La Vespa LX 125 3V tiene un precio, con promoción, de 2.999 euros y 3.274 euros con acabado Touring. En el caso de la S 125 3V, la normal cuesta 3.489 euros y, con terminación Sport, 100 más.

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