El Gobierno ha comunicado a los sindicatos que congelará el salario mínimo interprofesional (SMI) para 2012, según fuentes de los agentes sociales.
Esto supondrá pérdida de poder adquisitivo para aquellos ciudadanos que cobren el mínimo legal: a falta del dato de diciembre, la inflación cerró noviembre con una subida interanual del 2,9% respecto al mismo mes del pasado año.
El salario mínimo se situó en 641,40 euros este año, un 1,3% más que en 2010. Así, el sueldo quedó fijado en 21,38 euros al día con un cómputo anual que en ningún caso puede estar por debajo de los 8.979 euros.
El SMI español es uno de los más bajos de los países de la Eurozona que lo tienen establecido por Ley, tanto en términos absolutos como en paridad de poder de compra, solo por encima de Portugal.
Para los trabajadores eventuales y temporeros cuyos servicios a una misma empresa no excedan de 120 días, el salario mínimo se situó en 30,39 euros por jornada. Por último, para los empleados de hogar la cuantía establecida era de 5,02 euros por hora trabajada.
Los sindicatos pidieron revalorizar el SMI
CCOO y UGT enviaron una carta al anterior ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, para que el salario mínimo recuperara el poder adquisitivo perdido en 2010 y 2011, cuando subió menos que la inflación, y lo mantuviera en 2012, aunque no precisaban ninguna cifra.
Los sindicatos denunciaban en dicha misiva que el SMI ha perdido poder real de compra por el "fuerte aumento" del IPC y el "moderado incremento nominal" de este suelo salarial.
El SMI no subió menos de un 4% entre 2001 y 2009, pero sólo experimentó subidas del 1,5% y del 1,3% en 2010 y 2011, frente a los crecimientos del IPC del 1,8% y del 3,3% en estos años. El resultado ha sido un retroceso real del poder de compra del 0,3% en 2010 y del 2% este año.
En su carta, los sindicatos apuntaban que la crisis económica "no puede servir como excusa para desistir en el objetivo de alcanzar un salario mínimo del 60% del salario medio".
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