Homofobia en el restaurante

En España todavía puede ocurrir que dos mujeres se den un beso y un cruzado de la sexualidad les suelte esta retahíla de exabruptos: "Sois unas enfermas y tortilleras, iros a vuestra casa, bolleras de mierda". Según Marta, una de las mujeres de la pareja, que igual que su compañera Montse no quiere dar sus apellidos, un individuo de unos 65 años les dijo esto en el restaurante José Luis cuando salía del lugar, indignado, al parecer, por tener a dos mujeres dándose cariño a su lado. Marta incluso afirma que a ella le dio un golpe en la cara.

Montse y Marta han hecho público el caso con ayuda de la asociación gay Cogam y han puesto una denuncia en una comisaria. Aseguran que dan por perdida la posibilidad de que le agresor pague por lo que ha hecho (se fue del lugar con una señora antes de que llegase la policía y no se la podido identificar); su pretensión es que ayude a que haya más conciencia de esta clase de discriminaciones y "que se sepa que hay lugares que las permiten", dijo Marta en referencia a la supuesta "indiferencia" del encargado del restaurante José Luis ante la agresión. "Lo único que nos dijo es que habíamos montado un buen pollo", asegura.

El Cuerpo Nacional de Policía y el propietario de esta cadena de restaurantes, José Luis Ruiz, corroboran los insultos, pero negaron que el hombre hubiese golpeado a una mujer. En cuanto a la responsabilidad del encargado de su local, Ruiz afirmó que "lo único que hizo fue intentar aplacar los ánimos".