Javier Rodríguez, el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid que intervino desafortunadamente en el polémico contagio de ébola por parte de la auxiliar de enfermería Teresa Romero, ha sido destituido este jueves por el presidente de la Comunidad, Ignacio González.
El lider del ejecutivo regional le ha pedido a Rodríguez, médico de profesión, que cesara en su cargo, según fuentes de la Comunidad. Rodríguez no sólo minusvaloró la capacidad de la auxiliar infectada de ébola -"no hace falta un máster para ponerse el traje [de protección]"- y sugirió que se había contagiado ella misma -"aunque esto es de mi cosecha", llegó a decir-, sino que volvió a intervenir en el asunto con estrépito este jueves.
Tras ser demandado por la auxiliar, que le pide 150.000 euros por entender vulnerado su derecho al honor, Rodríguez aseguró este miércoles que si él "lo hubiese hecho mal" Teresa Romero "no estaría hablando", a lo que añadió que si su gestión frente a la crisis del ébola no hubiese sido la correcta, "España seguiría teniendo esta enfermedad".
En declaraciones a Europa Press Televisión, Rodríguez no se quiso pronunciar sobre la querella que le interpuso Romero por vulnerar su honor y dijo que no se lo puede "impedir" ya que está en "su derecho". "Lo que tengo que hacer es felicitarnos porque no se ha muerto y porque haya tenido un final feliz", explicó.
Horas después de su destitución, el gobierno de la Comunidad de Madrid había afeado las palabras de Rodríguez. "Lamentar las declaraciones y me parecen tan chocantes como para usted", aseguraba el portavoz del Ejecutivo autonómico, Salvador Victoria.
"No hemos tratado el asunto -mantenerlo o cesarlo- en el Consejo de Gobierno", aclaraba en ese momento a la vez que señalaba que "cualquier declaración chocante no es algo positivo, es lógico.Manifestar mi extrañeza cuando las hemos escuchado". Preguntado sobre si han pedido explicaciones, respondía que "él no es quien" para hacerlo.
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