La suspensión temporal del 'Programa de detección precoz del cáncer de mama (Deprecam)' en la Comunidad de Madrid ha dejado a unas 30.000 madrileñas sin mamografía preventiva. Un retraso en el nuevo contrato entre la Consejería de Sanidad y las clínicas privadas con las que mantiene un concierto en este terreno ha provocado que desde el pasado mes de marzo no se realicen mamografías preventivas en la comunidad.
Esta prueba preventiva se recomienda a todas las mujeres sanas de 50 a 69 años con una periodicidad bienal para tratar de identificar a tiempo cualquier lesión maligna en la mama. Sin embargo, según informa la Cadena Ser, un "problema en la prórroga del contrato" entre la Comunidad y las clínicas privadas que realizan la prueba desde 1999 ha provocado sus suspensión en la región desde hace siete meses.
En este tiempo, unas 30.000 madrileñas en ese grupo de edad se han quedado sin hacerse una mamografía, aunque la Comunidad insiste en que se va a citar a todas ellas antes de final de año. Al tratarse de mujeres sanas, insisten, retrasar unos meses la prueba no va a suponer ningún riesgo para su salud. Este concierto con clínicas privadas afecta únicamente a este tipo de mamografía profiláctica, no a las que se tienen que realizar mujeres con sospecha, porque se han detectado un bulto, por ejemplo.
El consejero Javier Fernández Lasquetty participa en un acto a las 11.00 y es probable que dé más detalles sobre este retraso.
Pero las clínicas privadas no son las únicas que han sufrido retrasos. El nuevo contrato entre Capio y la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) también ha sufrido retrasos en los autobuses móviles que realizan las mamografías por la comunidad en aquellos municipios donde no hay acceso a clínicas privadas con concierto, informa María Valerio.
Según han confirmado a ELMUNDO.es fuentes de la propia AECC, el proceso para sustituir los siete equipos de mamografía por mamógrafos digitales más modernos ha causado un retraso de "un mes o mes y medio", aunque insisten en que ahora mismo se están "realizando horas extra" para ponerse al día y completar las 130.000 mamografías al año que tiene comprometido el programa.
Según el nuevo acuerdo firmado por la AECC y la empresa privada Capio, ésta última se ha hecho cargo de la compra de los siete aparatos y ha asumido los contratos del personal no médico del programa de detección precoz del cáncer de mama, a quien se ha respetadolas condiciones laborales, salarios y antigüedad que disfrutaban cuando eran trabajadores de la AECC.
La ONG pagó más de siete millones de Capio para que se hiciesecargo del reemplazo de los mamógrafos, tal y como pedía la Comunidad de Madrid, que tiene un acuerdo con la AECC para que se haga cargo de 130.000 mamografías al año en la región. Aunque la AECC admite que no sabe cuántas mujeres se han podido ver afectadas por este retraso, insiste en que se está haciendo un esfuerzo para cumplir ese objetivo antes de final de año.
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