El ex jugador de la selección brasileña de los años 80, Sócrates, ha fallecido en el Hospital Israelita Albert Einstein de Sao Paulo a consecuencia de un choque séptico de origen intestinal causado por una bacteria. El ídolo del Corinthians, de 57 años y padre de seis hijos, se encontraba en diálisis en la que era su tercera hospitalización por sus problemas hepáticos provocados por el consumo prolongado de alcohol.
Sócrates tuvo que ser ingresado en septiembre por problemas en el hígado y permaneció 17 días en el hospital, nueve de ellos en coma inducido. En el mes de agosto ya había tenido que visitar centros médicos por una hemorragia digestiva.
El ex jugador, que pasó a la historia por su calidad y su finura apoyado en su diminuto pie (calzaba un 37), reconoció su adicción al alcohol tras hacerse públicos sus problemas, además de advertir que lo había consumido durante toda su carrera.
El brasileño había mostrado su intención de rehabilitarse para recuperarse de esa crítica situación. Sin embargo, Sócrates, que también militó en las filas de Fiorentina, Flamengo, Santos y Botafogo, no pudo cumplir su deseo y falleció la pasada madrugada.
Sócrates también conjugó el fútbol con la política, fue un activo militante de izquierdas en las décadas de 1970 y 1980 y participó en múltiples protestas contra la dictadura que gobernó Brasil entre los años 1964 y 1985.
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