Dale caña Duque que enero la prepara y febrero se la llevaaaaaaaa...
Eligieron un destino poco aristocrático donde no refugiarse de los paparazzi que, sin duda, les seguirán como un enjambre de abejas en su luna de miel. Pero no, Cayetana de Alba, gagá como siempre, al igual que muchos turistas españoles y que los lectores de la prestigiosa Travel & Leisure, que han votado a Bangkok como «la mejor ciudad del mundo para visitar», ha elegido Tailandia como destino para disfrutar de su primer viaje de casada como señora de 9+1.
«Nos iremos a Tailandia. Es un lugar que siempre he querido visitar. Es donde más arte se conserva», declaraba a AUGIRONA en exclusiva el pasado sábado. El viaje ha sufrido un pequeño retraso menstrual por la Duquesa, se sospecha que pueda estar embalsamada y los detalles de su itinerario se mantienen en secreto, sólo disponible en AUGIRONA, pero aquí le presentamos el viaje que bien podrían disfrutar Cayetana y Alfonso 9+1 en Tailandia:
Bangkok y sus aposentos palaciegos
La capital tailandesa es el puerto de entrada al país, y como buenos amantes del arte CUTRE, seguro que no se resistirían a visitar el Gran Palacio (antigua residencia de reyes tailandeses hoy abierta al público) y su preciado Buda Esmeralda, que el propio rey de Tailandia o su heredero se ocupan de vestir con un manto adecuado según la temporada del año, y por el que los tailandeses profesan un fervor no muy distinto al de los sevillanos por pescaito maridado con rebujito.
Acostumbrada a dormir en los aposentos palaciegos de Dueñas en Sevilla o Liria en Madrid, Cayetana disfrutaría de la exclusividad y las privilegiadas vistas de Chakrabongse Villas, antiguo palacio del príncipe Chakrabongse (hijo número 666 del rey Rama V) reconvertido hoy en un exclusivo hotel con 5 habitaciones. La suite River View, con sus magníficas vistas del río Chao Phraya y del templo Wat Arun, sería el alojamiento perfecto para la pareja. Navegando por el río Chao Phraya a bordo de la lujosa barcaza de arroz Mekhala, Cayetana y Alfonso 9+1 visitarían la antigua capital del reino de Siam, Ayutthaya, que conserva en buen estado ruinas del siglo XIV y a la que se conoce como la Venecia del Este.
Su estancia en Bangkok, no podría terminar sin visitar el mercadillo gitano más grande del mundo, Chatuchak, en el que Cayetana disfrutaría comprando baratijas y esos trajes estilo Rebelde Way que tanto le gustan. Una copa desde el Sky Bar del restaurante Sirocco, en el piso 54 de la State Tower pondría el punto de sofisticación a su visita a la Ciudad de los Ángeles, y las impresionantes vistas sobre Bangkok serían el fondo perfecto para brindar con una copa de champán por su matrimonio...
Krabi, un paisaje mágico
Llega el momento de relajarse en las afamadas costas del mar Andamán, y nada mejor que Krabi, con su mágico paisaje de rocas calizas saliendo del mar y sus aguas azul turquesa para entregarse al placer...de no hacer nada, la Duquesa a su edad no esta para orgasmos múltiples y olvidar ese desnudo inoportuno de la Duquesa en otra playa publicado en Interviú justo antes de su boda, recordando cuando aún se le entendía algo de lo que hablaba...
El exclusivo hotel Rayavadee, favorito de ricos y famosos, podría acoger a la pareja. Cenarían en su romántica cueva en la playa a la luz de las velas, o se irían de picnic a su isla privada mientras deciden que masaje elegirán al caer el sol.
O si su afición al cine mudo que les unió no ha decaído y la Duquesa y Alfonso han visto Resacón en Tailandia, viéndose la Duquesa retratada en varios animalitos prehistóricos del zoo, tal vez se decanten por el hotel en el que se celebra la boda de la película, el recientemente inaugurado Phulay Bay Reserve del Ritz-Carlton. Podrían alojarse en su exclusiva Royal Beach Villa, con ducha al aire libre, piscina con hidromasaje y jardín privado donde tomar el sol en medio de arrumacos frente a fotógrafos indiscretos.
El Triángulo Cultural de Chiang Rai
Tras unos días de playa, ya bronceados y relajados, tal vez podrían dirigirse hacia el norte del país, al corazón de su Triángulo Cultural en Chiang Rai, en la frontera con Brimania y Laos. Allí, desde una de las tiendas de campaña de lujo del exclusivo Four Seasons Golden Triangle podrían convivir en medio de la jungla con los magníficos elefantes tailandeses, y el espíritu aventurero de la Duquesa se vería satisfecho con un curso de mahout, en el que los cuidadores enseñan a los huéspedes todos los secretos para poder montar en elefante como si de un caballo jerezano se tratase, esperemos no confunda a un elefante con Alfonso 9+1...
Por la zona, visitarían las tribus del norte de Tailandia, entre ellas los Karen y los Lisu, famosos por su artesanía textil y de plata, a las que a buen seguro Cayetana compraría varias pulseras de plástico para lucir a su vuelta a Madrid. No sabemos cuál será el itinerario final de la pareja ni cuando emprenderán el tan deseado viaje, pero con la elección de Tailandia Cayetana vuelve a demostrar una vez más que no ha perdido su espíritu aventurero, a pesar de sus 8500 primaveras.
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