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lunes, 25 de julio de 2011

31 goles de Forlán

Diego Forlán no había podido anotar en toda la Copa América. Pero en la final se despachó con dos goles que le permitieron alcanzar a Héctor Scarone, el máximo artillero de la historia celeste.

Iban 41 minutos del primer tiempo cuando el maleficio llegó a su fin. El "Cacha" Arévalo Ríos, de gran partido, habilitó a Forlán que con preciso zurdazo anotó el segundo gol de los celestes y el primero de su cosecha en la Copa América Argentina 2011.

"Cachavacha" salió corriendo, abrió sus brazos al cielo y pegó un salto con el puño en alto. Sus compañeros corrieron a abrazarlo, los suplentes se sumaron al festejo. En el banco el maestro Tabárez y sus colaboradores lo gritaron enloquecidos. El último abrazo de Forlán fue para el "Ruso" Pérez, quien pareció decirle "¿viste?, yo te dije que ibas a hacer un gol".

Es que por más que Forlán hubiera repetido hasta el cansancio en cuanta entrevista le realizaron durante el torneo que no le preocupaba su sequía goleadora, y que sólo quería que Uruguay ganara la Copa, su reacción y la de sus compañeros, demostró que necesitaba ese gol.

Atrás quedó la que Justo Villar le sacó en un mano a mano diez minutos antes. Ya no importó la volea que picó mal y terminó en las manos del arquero paraguayo a los 36`. Ni la que pudo haber sido al principio del segundo tiempo, cuando Suárez robó una pelota y le dio un pase espectacular, pero nunca le llegó porque la cortó un paraguayo.

En el complemento Forlán no entró mucho en juego. Pero al final del partido recibió una pelota de Suárez, su gran socio, y apenas la tocó para marcar el tercero celeste, para que la final terminara en goleada y para alcanzar a Scarone.

1 Preciso zurdazo pura clase

Diego Forlán recibe el exacto pase de Egidio Arévalo y de zurda anota el segundo gol uruguayo y el primero de su cosecha en la Copa América. Al arquero paraguayo Justo Villar no le quedó más que mirar la trayectoria de la pelota hasta verla estrellarse en la red.

2 Un campeón de familia

Al final del partido se besó el escudo de la AUF. Fue uno de los últimos futbolistas en subir a recoger la medalla de Campeón de América. Y llevó durante un corto trayecto la copa durante la vuelta olímpica. Luego se abrazó con Tabárez y no se olvidó de los suyos. "Este trofeo significa mucho para mí. Mi abuelo ganó esta copa, mi padre también y ahora yo. Son tres generaciones, significa mucho para la familia", dijo.

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