En la fecha marcada en el calendario por Zapatero, el Consejo de Ministros dará luz verde a la anunciada reforma del mercado laboral. Aunque la vicepresidenta De la Vega advirtió que todavía no existía ningún documento 'válido ni oficial' sobre el contenido de la misma, los sindicatos pueden valerse del documento de propuesta que el Gobierno entregó a los agentes sociales el pasado mes de abril.
En el mismo, se esbozaban las líneas generales de la reforma: como la adopción del sistema austriaco de indemnización por despido. Este sistema consiste en que las empresas crean un fondo de indemnización por despido para los trabajadores que pueden llevarse a su nuevo puesto. El Gobierno cree que favorecería la movilidad laboral.
Otro documento filtrado a RNE indicaba que el Gobierno estudiaba la posibilidad de facilitar el despido en las empresas en crisis. Esto supondría instaurar como causa para el despido procedente la mala situación económica. Dicho de otra forma, una rebaja del coste del despido, ya que los procedentes, que actualmente suponen tan sólo el 20% del total, implican una compensación de 20 días por año trabajado.
La decisión de los sindicatos
Tras la guerra de cifras por el seguimiento de la huelga de funcionarios, la tarea de convencer a los sindicatos para frenar la huelga general se antoja difícil. Los líderes sindicales ya dieron pistas el martes de sus posiciones ante la decisiva reunión de hoy.
Cándido Méndez, secretario general de UGT, advirtió en declaraciones a los periodistas durante la manifestación central del martes que la huelga de funcionarios puede significar "el principio de muchas más", y eso dependerá de lo que haga el Gobierno.
El líder de UGT prometió que pondría "toda la carne en el asador" para buscar un acuerdo que infunda confianza en la última reunión, informa Europa Press.
Por su parte el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, aseguró que la huelga en el sector público es la "primera respuesta" ante el giro "radical" de las políticas de los gobiernos europeos.
"El Gobierno tiene en sus manos terminar con el conflicto social", aseveró, tras señalar que si en las próximas semanas Zapatero consolida el giro en lo económico y en lo social con una reforma laboral lesiva, habrá una huelga general.
"Que a nadie le quepa duda de que habrá una huelga general que será masiva porque será entendida por toda la sociedad española", dijo.
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